Adoradores del verano, cuidado: ¡empiezan las vacaciones! Independientemente de dónde pases las vacaciones, siempre hay bellos momentos veraniegos que capturar. Desde los relajados amantes del sol y los campistas activos hasta los veraneantes que vuelven a casa, ¡todo el mundo quiere buenas fotos de sus vacaciones! ¿Crees que tus fotos de vacaciones necesitan un empujón? Aquí tienes 7 consejos para mejorar tu técnica fotográfica.
1. Estrés a la hora de elegir cámara
La gente suele pensar que cuanto más cara sea la cámara, mejores serán las fotos. Piénsalo otra vez, ¡porque no tiene por qué ser así! De hecho, la mejor cámara es la que llevas contigo en ese momento. Con un teléfono, por ejemplo, puedes hacer instantáneas de forma rápida y discreta, mientras que con una réflex puedes hacer amplios reportajes. Es más importante cómo haces la foto que con qué. Así que ¡dispara!
2. Haz los deberes
Los viajeros se pueden dividir en dos grupos: o bien perteneces al grupo de "voy-blanco-en-pata-y-dejo-que-te-sorprenda" o bien perteneces al grupo de "no-dejo-que-ocurra-nada". Para este último grupo, Instagram y Pinterest son, por supuesto, muy útiles. Busca hashtags o términos de búsqueda de tu destino e inspírate con imágenes o lugares preciosos que de otro modo te perderías. Especialmente útil si tienes poco tiempo para explorar la zona por ti mismo.
3. Míralo con otras gafas (de sol)
La composición determina, entre otras cosas, si tu foto es agradable a la vista. Para atraer al espectador al punto adecuado de la foto, puedes utilizar la "regla de los tercios". Se trata de dividir la imagen en 9 bloques, como muestra la imagen de abajo. En cuanto sitúes el sujeto en una de las intersecciones de la cuadrícula, la atención se dirigirá hacia allí. Es bueno colocar un horizonte en una de las líneas de 1/3, para que la foto quede bien equilibrada.
4. No te acuestes
Cuando estás de vacaciones, es estupendo adoptar una posición horizontal. Sin embargo, esto no siempre es aplicable a tus fotos. Las fotos verticales también pueden ser muy bonitas. Como los retratos, los edificios altos y las calles estrechas. Enséñate a hacer fotos verticales con regularidad.
5. El sol en mi mente
Todos vivimos bajo el mismo sol, así que un consejo para todo el mundo: aprovecha la luz solar. Hacia el mediodía, el sol está en su punto más alto. No sólo hace mucho calor al sol a esa hora, sino que además produce sombras muy marcadas en la cara y hace que entrecierres los ojos. Es mejor hacer fotos por la mañana o por la tarde, ya que entonces el sol está más bajo. Si no hay más remedio, busca un lugar a la sombra.
6. Apreciar las pequeñas cosas
A menudo tendemos a fotografiar grandes momentos y lugares especiales e ignoramos las cosas cotidianas. Porque lo que ves/haces a menudo se convierte en normal y lo que es normal muchas veces no nos parece interesante de capturar. Una pena. También suele estar en las pequeñas cosas. Así que haz una foto del colorido arbusto de flores por el que pasas todos los días, de lo bien que te lo pasas mientras cierras la cremallera de la maleta o de tu bebida veraniega favorita que te tomas desde hace semanas. ¡Así darás un toque personal a tus fotos!
7. ¿Dónde te haces los selfies?
Cuando se visitan lugares hermosos, es muy tentador quedarse atrapado fotografiando toda esa belleza. Clic, clic, clic, todo el mundo sale en la foto y te vas. Al volver a casa, compruebas las imágenes tomadas y llegas a la conclusión de que no se me ve por ninguna parte. Evita la decepción y pídele también a tu hijo, a un amigo o a un transeúnte que te capte, que para algo se han convertido en un término los maridos de Instagram. Así que ¡a disfrutar!
Disfruta de tus vacaciones y ¡feliz rodaje!